- Herramientas
- Palanca
- Martillo
- Sierra de calar
- Hoja para madera
- Escofina
- Formón
- Avellanador
- Lijadora orbital
- Lija de grano medio
- Taladro
- Broca para madera de Ø 4 mm
- Broca de widia de Ø 8 mm
- Materiales
- Palé
- Cola para madera
- Clavos de cabeza perdida
- Escarpias
- Tacos de nailon de Ø 8 mm
Para realizar la estructura simplemente necesitaremos un palé. Lo desmontamos y preparamos las piezas que vayamos a usar. A continuación, unimos los listones entre sí con cola para madera y puntas de cabeza perdida. Terminaremos el trabajo, colocando los clavos originales del pale a modo de embellecedores.
Paso a paso para hacer un botellero con un palé

En primer lugar, soltamos los listones que conforman el palé, con la ayuda de una palanca y el martillo. Debemos tener cuidado de no romper las piezas.

A medida que las vamos soltando, retiramos los clavos, en la medida de lo posible, sin romperlos. Los que saquemos enteros los guardamos para después, usarlos como embellecedores.

Cortamos las piezas que necesitamos para construir el botellero, empleando la sierra de calar y una hoja para madera. Después, dibujamos las hendiduras para las copas.

Sujetamos la pieza a la mesa con una mordaza y hacemos los agujeros con el taladro y una broca para madera. Es conveniente colocar un mártir debajo de la pieza a perforar, con el fin de no dañar la mesa.

Avellanamos los orificios y realizamos las hendiduras con la sierra de calar provista de la hoja para madera. Rematamos el trabajo pasando el formón por el interior de las ranuras.

Lo siguiente que haremos es repasar toda la superficie de madera con la lijadora orbital y una hoja de lija de grano medio, hasta dejarla totalmente lisa y sin aristas.

Cuando hayamos retirado el polvo producido, aplicamos cola para madera en las zonas de unión y montamos la estructura.

A continuación, reforzamos las uniones insertando puntas de cabeza perdida a golpe de martillo.

Es el turno de los embellecedores. Recuperamos los clavos retirados al principio y los introducimos en las uniones, procurando tapar las puntas de cabeza perdida.

Una vez que tengamos el botellero terminado, vamos a la pared en la que deseamos instalar nuestro nuevo mueble y realizamos los agujeros de fijación. Para eso, utilizaremos el taladro en posición de percusión y una broca de widia del mismo diámetro que los tacos que vayamos a emplear.

Luego, insertamos los tacos de nailon con la ayuda del martillo y colocamos las escarpias.

Por último, colgamos la estructura y comprobamos que está correctamente sujeta.

Ya podemos almacenar las botellas y suspender las copas en nuestro nuevo y original botellero.

Un mueble auxiliar, práctico y decorativo, que quedará ideal en cualquier cocina. A partir de ahora tendremos el vino en todo momento disponible y las botellas perfectamente organizadas.